La hipersensibilidad te hace disfrutar de todos los sutiles matices, cada detalle tiene su textura maravilladora.
Hasta que llega la sacudida de lo inimaginable. Tendrás q luchar por abandonar la mente hasta concertar un pacto con tus sentidos. La hipersensibilidad es un lujo que tu economía emocional ya no puede permitirse; tiene que transformarse en algo más grande, hiperconsciencia, hiperamor.
Daría todo por tenerte, fluir como antes sin más historia que un largo paseo que se agarra a nuestros perros.
Pero es imposible, no puede ser. A cambio paseo con ellos y sin ti, escucho atentamente a quienes me quieren, leo mucho, escribo, le hago la pelota a mi mente para que me invite a quererme un ratito, veo películas para colarme en otras estancias.
Como nos recomendó ANA PEINADO vi «Nuestro Hogar». Y dejé que mi ignorancia recibiera el calor de un posible misterio. Ni siquiera la palabra misterio puede designar lo que habrá, no podemos describirlo con nuestra expresión; pero las imágenes ayudan, el cine ayuda tanto a la vida que puede ayudar a mirar la muerte.
Ésta no es imaginable y, sin embargo, es palpable.
Nuestro hogar ocupará un espacio.
Determinado o indeterminado, pero prometedor como ver venir veranos en el mes de mayo.
Recuerdo, escribo y amo todas tus frases locas, todas tus divertidísimas ocurrencias. Y no me encajan las alas sin nuestra risa.
Hasta que llega la sacudida de lo inimaginable. Tendrás q luchar por abandonar la mente hasta concertar un pacto con tus sentidos. La hipersensibilidad es un lujo que tu economía emocional ya no puede permitirse; tiene que transformarse en algo más grande, hiperconsciencia, hiperamor.
Daría todo por tenerte, fluir como antes sin más historia que un largo paseo que se agarra a nuestros perros.
Pero es imposible, no puede ser. A cambio paseo con ellos y sin ti, escucho atentamente a quienes me quieren, leo mucho, escribo, le hago la pelota a mi mente para que me invite a quererme un ratito, veo películas para colarme en otras estancias.
Como nos recomendó ANA PEINADO vi «Nuestro Hogar». Y dejé que mi ignorancia recibiera el calor de un posible misterio. Ni siquiera la palabra misterio puede designar lo que habrá, no podemos describirlo con nuestra expresión; pero las imágenes ayudan, el cine ayuda tanto a la vida que puede ayudar a mirar la muerte.
Ésta no es imaginable y, sin embargo, es palpable.
Nuestro hogar ocupará un espacio.
Determinado o indeterminado, pero prometedor como ver venir veranos en el mes de mayo.
Recuerdo, escribo y amo todas tus frases locas, todas tus divertidísimas ocurrencias. Y no me encajan las alas sin nuestra risa.
Comentarios
Publicar un comentario